La sequía deja al descubierto el dolmen de Guadalperal: el Stonhenge Español
El dolmen de Guadalperal, o también llamado "el tesoro de Guadalperal", es un complejo megalítico perteneciente a un yacimiento de la Edad del Bronce, y oculto durante décadas que ha surgido debido a la sequía.
Este tesoro, que se cree que datan del año 4000 a. C, fue excavado y estudiado entre 1927 y 1930 por el arqueólogo Hugo Obermaier. Tras la construcción de la presa de Valedecañas, entre 1957 y 1964, este quedó sumergido bajo las aguas del embalse.
El embalse de Valdecañas pertenece al término municipal de El Gordo, Cáceres, aunque el municipio más cercano al complejo es Peraleda de la Mata. Así, el descenso del nivel del agua del pantano donde se encuentra, a orillas del Río Tajo, dejó al descubiero las docenas de piedas megalíticas dispuestas verticalmente.
Dolmen de Guadalperal declarado Bien de Interés Cultural
Desde agosto de 2019 y a consecuencia de la sequía, que provocó una bajada del nivel de agua, el monumento megalítico quedó al descubierto, generando gran interés entre en los arqueólogos, los vecinos de la zona y turistas. A partir de ese momento, el Ministerio de Cultura y Deporte comenzó distintas actuaciones para contribuir a la protección legal del yacimiento, aumentar el conocimiento del bien y tomar las medidas adecuadas para su correcta conservación.
Durante los veranos de 2019, 2020 y 2021, un equipo multidisciplinar de técnicos realizó diferentes trabajos de documentación, investigación y conservación de todo el conjunto megalítico. Para ello, se constituyó el Grupo de Trabajo del Dolmen de Guadalperal, formado por la Junta de Extremadura y los ministerios de Cultura y Deporte y de Transición Ecológica, que ha permitido la investigación y el trabajo sobre los elementos del patrimonio sumergido del embalse extremeño.
El 10 de mayo de 2022 fue declarado Bien de Interés Cultural por el Consejo de Ministros, un procedimiento iniciado por la Dirección General de Patrimonio Cultural y Bellas Artes e incoado el 22 de diciembre de 2020
La falta de lluvia lo deja al descubierto
España ha experimentado falta de lluvia y temperaturas récord este verano, al igual que muchos de los países europeos. Uno de los resultados de la sequía y falta de lluvia en nuestro país es esta vista, increíblemente rara, que ha generado una gran intriga. Oficialmente conocido como dolmen de Guadalperal, la formación rocosa hecha por el hombre y apodada, equivocadamente, "Stonehenge español" por su parecido al Stonehenge inglés más famoso, surgió del embalse de Valdecañas en la provincia española de Cáceres, donde la falta de lluvias ha hecho bajar el nivel del agua al 28% de su capacidad.
Tipológicamente, el dolmen es un sepulcro de corredor con una cámara funeraria de 5 metros de diámetro y un largo corredor de casi 10 metros de largo y 1,50 metros de ancho. La estructura ofrece una triple línea de ortostatos dispuestos de forma concéntrica en torno a la cámara, además de algún ortostato de significado simbólico.
Esta formación ha estado cubierta desde 1963 y fue estudiada por el prestigioso arqueólogo alemán Hugo Obermaier ya en 1927.
Los vecinos del pueblo, indican que habían visto en ocasiones anteriores, partes del Dolmen asomar desde el agua, en otros momentos de sequía, siendo esta la primera vez, que se puede apreciar el complejo en su totalidad desde hacía décadas. La exposición de esta evidencia megalítica, ha llevado a la curiosidad histórica sobre quién erigió originalmente el dolmen.
Una de las teorías sugiere que, la formación fue creada con la intención de actuar como una tumba con restos humanos, encontrados en dólmenes similares en toda Europa occidental. Sin duda, una gran oportunidad, para acercarnos a este complejo megálito de gran valor.
Las condiciones de sequía no solo han desenterrado este dolmen, otros fenómenos están surgiendo en ríos europeos. En muchos ríos europeos, han aflorado recientemente "las piedras del hambre", rocas con mensajes que marcan niveles bajos de agua, grafiadas por nuestros antepasados. Estas piedras estaban pensadas como advertencias, sobre la hambruna y datan del siglo XV.
Fuera de Europa, los niveles de agua en el río chino Yangtze, han bajado tanto que se han descubierto antiguas estatuas budistas.
Aunque resulta interesante poder contemplar los monumentos y descubrimientos con estas situaciones, cabe recordar que las sequías traen numerosos problemas de distinta índole y, en situaciones como la actual, hacer un uso y consumo responsable del agua.